Como vosotros sabreis, en la psicologia y en la psicoterapia hay diferentes escuelas. Yo, por mi formación, entiendo la terapia desde una concepción abierta i flexible que integra diferentes modelos, y donde todos pueden tener cabida, desde el modelo sistémico, al narrativo, pasando por el cognitivo-conductual hasta el humanista.
Ademas me oriento hacia una terapia centrada en las soluciones y las posibilidades, lejos de victimismos, autocompasiones y dependencias.
También quiero comunicaros que no soy partidaria de terapias prolongadas ni muy frecuentes. Así prefiero los procesos terapéuticos breves (4-10 sesiones) y menos frecuentes (cada 2 ó 3 semanas al principio).
Deciros que no me creo en la posesión de la verdad, en el tipo de vida adecuada, ni en la familia ni la pareja perfecta, porque soy persona antes que psicóloga, y la propia existencia vital hace que todos tengamos luces y sombras, momentos de bajón y subidón, o simplemente grandezas y miserias.
Por todo ello tengo una disposición abierta al cambio, a experimentar, a aprender del dolor y de las crisis, y a madurar a partir de las dificultades.
En la terapia os ofreceré otra manera de analizar el problema, e intentaré abrir nuevas perspectivas y psibilidades, describiendo una realidad más flexible, y esperanzada.
Pero sobre todo, trabajaremos la posibilidad de que el cliente pueda recuperar su potencial humano y sobre todo esa capacidad insospechada de supervivencia y superación que tenemos todos.
